Luis F. Sanz, Manuel Gil, Max Hierro y Alicia C. Diaz _ Ilustración

Luis F. Sanz.
Nace el 20 de Marzo de 1976 en Villafranca del Bierzo (León) y desde el momento en que cae un lapicero a sus manos comienza a hacer garabatos. Teniendo una vocación tan temprana por el dibujo, decide apostar por ello, y encauzar su vida hacia el camino de la expresión gráfica. En 2001 se licencia en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca y seguidamente viajará a Madrid para continuar su camino y adentrarse en el mundo de la ilustración. Su destreza y cabezonería le han llevado a ilustrar desde libros infantiles hasta artículos en prensa diaria. Desde 2003 es colaborador habitual del diario El País, y revistas como Emprendedores, Rolling Stone, Zero, Calle 20, Quo o editoriales como Anaya, Planeta, Alianza Editorial y otros tantos medios de información han tenido el placer de contar con su colaboración. También podemos ver su trabajo en el catálogo que La Diputación de León publica en 2007, con su trayectoria hasta ese momento. Ahora Espora tiene el placer de recoger parte de su obra personal en la que se puede apreciar el talento que ha llevado a este ilustrador a donde está.

Manuel Gil.
En Julio de 1971, la ciudad de Salamanca recibe, sin saberlo todavía, la llegada de una nueva promesa en el arte, al que sus padres bautizarán como Manuel. Tiempo después y entre sus amigos, responderá al nombre de Lete. Esta ciudad castellana le dará la oportunidad de licenciarse en Bellas Artes y comenzar su andadura como diseñador gráfico. Sus aspiraciones apuntan alto, y como buen espíritu inquieto, se traslada a Madrid en busca de nuevas experiencias. En esta ciudad le aguardan buenas oportunidades para demostrar su destreza como ilustrador y diseñador gráfico. Funda su propio estudio de diseño en septiembre de 2005, desde el que crea la maqueta de Calle 20, y se ocupa de la dirección de arte de la publicación. Tras haber disfrutado de su obra personal en distintas Galerías de ésta y otras ciudades españolas, Espora acoge con orgullo algunas de las piezas de este artista.

Max Hierro.
Este salmantino de 33 años comienza su andadura como estudiante de Diseño Gráfico en la Escuela de Arte de su ciudad natal, con más inquietudes que las del diseño, comienza a asistir a clases de dibujo en la Escuela de Bellas Artes de San Eloy. No satisfecho con esta formación, viajará a Asturias para cursar Grabado en la Escuela de Arte de Oviedo. Una vez que su ciclo de aprendizaje da por concluido regresa a Salamanca, pero su espíritu emprendedor le llevará a Madrid, donde tras peregrinar de editorial en editorial, decidirá independizar su trabajo como ilustrador. En esta ciudad tiene la oportunidad de demostrar su talento con publicaciones en distintos medios; colaborador del diario El País, o de revistas como Muy Interesante, Emprendedores o de editoriales como Anaya, Siruela o Edelvives. Sigue fiel a su vocación por el dibujo y lo demuestra, además de con su trabajo como dibujante de storyboard en spots televisivos y profesor en la Escuela Superior de Publicidad de Madrid, con su obra personal, en la que se puede apreciar esa libertad que añora cuando su lapicero está guiado por las pautas establecidas de algún tercero. Tras exponer su obra por diferentes espacios en ciudades españolas y europeas, Espora tiene la oportunidad de mostrar en estos días su creatividad y talento.

Alicia C. Díaz.
Como redactar un texto que haga justicia al talento de esta artista. Quizás no tenga una trayectoria editorial como sus colegas con los que comparte exposición, o quizás haya elegido no tenerla para no enturbiar de algún modo esa sensibilidad y entrega que deposita en cada una de sus piezas. Esta artista ponferradina confiesa hacer dibujitos desde hace mil años, puede que técnicamente no sea posible por sus 33 años cumplidos en 2008, pero cada vez que dedicas unos minutos a disfrutar cada una de sus piezas, te das cuenta de que hace falta tener más de mil años de vida interior para trasmitir esa cantidad de sentimientos y emociones a través de sus ilustraciones. Dice ilustrar situaciones muy concretas con conceptos extremadamente reiterados, que nadie termina de entender o que cada cual entiende a su manera y que es con esto con lo que más se divierte. Por esto ha decidido ganarse la vida de otro modo que ilustrando para otros y el tiempo que dedica a sus dibujos es por mera entrega y dedicación al arte. Espora apuesta por su talento ofreciendo una pequeña muestra de su trabajo y brindando una ventana a todos los que quieran disfrutar de su obra.

LUIIS F. SANZ

Nace el 20 de Marzo de 1976 en Villafranca del Bierzo (León) y desde el momento en que cae un lapicero a sus manos comienza a hacer garabatos. Teniendo una vocación tan temprana por el dibujo, decide apostar por ello, y encauzar su vida hacia el camino de la expresión gráfica. En 2001 se licencia en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca y seguidamente viajará a Madrid para continuar su camino y adentrarse en el mundo de la ilustración. Su destreza y cabezonería le han llevado a ilustrar desde libros infantiles hasta artículos en prensa diaria. Desde 2003 es colaborador habitual del diario El País, y revistas como Emprendedores, Rolling Stone, Zero, Calle 20, Quo o editoriales como Anaya, Planeta, Alianza Editorial y otros tantos medios de información han tenido el placer de contar con su colaboración. También podemos ver su trabajo en el catálogo que La Diputación de León publica en 2007, con su trayectoria hasta ese momento. Ahora Espora tiene el placer de recoger parte de su obra personal en la que se puede apreciar el talento que ha llevado a este ilustrador a donde está.

MANUEL GIL

En Julio de 1971, la ciudad de Salamanca recibe, sin saberlo todavía, la llegada de una nueva promesa en el arte, al que sus padres bautizarán como Manuel. Tiempo después y entre sus amigos, responderá al nombre de Lete. Esta ciudad castellana le dará la oportunidad de licenciarse en Bellas Artes y comenzar su andadura como diseñador gráfico. Sus aspiraciones apuntan alto, y como buen espíritu inquieto, se traslada a Madrid en busca de nuevas experiencias. En esta ciudad le aguardan buenas oportunidades para demostrar su destreza como ilustrador y diseñador gráfico. Funda su propio estudio de diseño en septiembre de 2005, desde el que crea la maqueta de Calle 20, y se ocupa de la dirección de arte de la publicación. Tras haber disfrutado de su obra personal en distintas Galerías de ésta y otras ciudades españolas, Espora acoge con orgullo algunas de las piezas de este artista.

MAX HIERRO

Este salmantino de 33 años comienza su andadura como estudiante de Diseño Gráfico en la Escuela de Arte de su ciudad natal, con más inquietudes que las del diseño, comienza a asistir a clases de dibujo en la Escuela de Bellas Artes de San Eloy. No satisfecho con esta formación, viajará a Asturias para cursar Grabado en la Escuela de Arte de Oviedo. Una vez que su ciclo de aprendizaje da por concluido regresa a Salamanca, pero su espíritu emprendedor le llevará a Madrid, donde tras peregrinar de editorial en editorial, decidirá independizar su trabajo como ilustrador. En esta ciudad tiene la oportunidad de demostrar su talento con publicaciones en distintos medios; colaborador del diario El País, o de revistas como Muy Interesante, Emprendedores o de editoriales como Anaya, Siruela o Edelvives. Sigue fiel a su vocación por el dibujo y lo demuestra, además de con su trabajo como dibujante de storyboard en spots televisivos y profesor en la Escuela Superior de Publicidad de Madrid, con su obra personal, en la que se puede apreciar esa libertad que añora cuando su lapicero está guiado por las pautas establecidas de algún tercero. Tras exponer su obra por diferentes espacios en ciudades españolas y europeas, Espora tiene la oportunidad de mostrar en estos días su creatividad y talento.

ALICIA C. DIAZ

Como redactar un texto que haga justicia al talento de esta artista. Quizás no tenga una trayectoria editorial como sus colegas con los que comparte exposición, o quizás haya elegido no tenerla para no enturbiar de algún modo esa sensibilidad y entrega que deposita en cada una de sus piezas. Esta artista Ponferradina confiesa hacer dibujitos desde hace mil años, puede que técnicamente no sea posible por sus 33 años cumplidos en 2008, pero cada vez que dedicas unos minutos a disfrutar cada una de sus piezas, te das cuenta de que hace falta tener más de mil años de vida interior para trasmitir esa cantidad de sentimientos y emociones a través de sus ilustraciones. Dice ilustrar situaciones muy concretas con conceptos extremadamente reiterados, que nadie termina de entender o que cada cual entiende a su manera y que es con esto con lo que más se divierte. Por esto ha decidido ganarse la vida de otro modo que ilustrando para otros y el tiempo que dedica a sus dibujos es por mera entrega y dedicación al arte. Espora apuesta por su talento ofreciendo una pequeña muestra de su trabajo y brindando una ventana a todos los que quieran disfrutar de su obra.